Había estado observando a Aioris desde mi dimensión por un tiempo, siempre se encontraba en Konoha hasta que un día decidió ir al bosque, y me pareció el momento perfecto para resolver lo que no habíamos terminado, culpa de los Anbus de Konoha. Un vórtice se abrió a unos metros de ella, mientras mi cuerpo salía de el, hasta encontrarse justo frente a ella.

-Gracias por ayudarme en Konoha, de todas formas, no pretendía permanecer mucho tiempo allí, y mucho menos pretendo hacerlo aqui. Podemos movernos a mi dimensión?

No quería que nada inesperado ocurriese, justo como la otra ves, debía mantener mi localización y status por los suelos. Si no todos mis proyectos futuros quedarían estropeados.

Mi invitado se habia presentado por fin ala gran fiesta,el viento me nublaba la vista pero a un asi,su tono y vibrato de voz eran unicos..
No te ayude en lo absoluto,realmente no eres recibido en konoha .. Solo me queria asegurar que no te desviaras de tu camino,pero.. Ahora es una sorpresa encontrar aquien estuve esperando.
Dime.. Algo porque entraria de nuevo a mi funeral?
Recordando lo ultimo sucedido..me dispuse a preguntarle esto ultimo.
Probablemente se molestaria pero no me importaba,al parecer aun teniamos asuntos sin resolver..

Al escuchar las palabras de Aioris, me di cuenta que aun no se fiaba del todo de mi.

-Bueno...Uno de mis objetivos es intentar que eso cambie.

Tomé del hombro a Aioris llevándola a mi dimensión, donde ambos nos encontrábamos seguros.

-Ok, aqui podremos hablar tranquilos...

Mire seriamente a Aio mientras algunas dudas invadían mi cabeza, ya no podia esperar mas para preguntarselo..

-Aun no logro entender como es que sigues con vida, fuiste revivida?

Luego de formular mi pregunta sentí que debía haberla hecho con otras palabras, pero ya era demasiado tarde. Mientras la miraba tomé me senté en el piso, poniéndome cómodo e invitándola a ella a que también lo haga.

Aio parecía estar furiosa, tenía todo el derecho a estarlo, aunque verla así me ponía un tanto incomodo y culpable. Me acerqué a Aioris lentamente, completamente indefenso y preocupado.

-Se...Se que es dificil olvidar algo asi, pero por favor Aio...Necesito que me des otra oportunidad. No puedo pedirte que me perdones, mucho menos que lo olvides, pero porfavor ayudame...Ayudame a ayudar Aio, ayudame a corregir mis errores, ayudame para poder ayudar a crear un mundo mejor, mucho mejor de lo que estaba hace años, cuando la inseguridad y el odio eran los que nos dominaban.

Mi cuerpo quebró debido a la triztesa y cayó de rodillas frente a ella.

-No hay ningun día que me no me arrepienta de lo que hice. Me darás otra oportunidad para remediar mis errores?

Al escuchar las palabras de Aio sentí un gran alivio en mi interior, no dejaba de sentirme culpable, pero sabía que esto daría frutos en el futuro, que juntos podríamos lograr grandes cosas...

-Muchisimas gracias...

Me reincorporé lentamente, volviendo a adoptar mi antigua postura, me encontraba sentado con las piernas cruzadas frente a ella.

-Gracias por escucharme Aioris, es muy importante para mi.

Quería hablar con ella acerca sobre lo que había pasado últimamente con respecto a mi status y esas cosas.

-Verás Aio...Hace varios meses fui a hablar con Kenji, nos encontramos en el bosque, el estaba de viaje con una joven, posiblemente su estudiante. Quería hablar con el con respecto a lo que había pasado entre nosotros y Konoha hace algunos años, pero ambos fuimos atacados por un ninja de Amegakagure. Este, no se como, logró inducirnos en jutsu de control mental, ocasiando así grandes crímenes contra Kiri a nuestro nombre. Luego me envió a Iwakagure, donde Osva y Reimon lograron detenerlo, luego de eso Osva me llevó a su dimensión donde me retubo durante un largo tiempo. Deduje que no saldría de allí nunca mas asi que finjí mi muerte haciendo desaparecer mi Chakra y cuerpo, pero logré traerlo aquí. Me he dado cuenta que lo mejor para todos era hacer desaparecer mi influencia directa en el mundo Ninja, y elegí actuar entre las sombras y prepararme para mi regreso, solo cuando sea extremadamente necesario. Sería muy importante para mí que me ayudases a cambiar el mundo, traer la paz sin necesidad de una guerra. Juntos podríamos hacerlo. Que dices?

Mire directamente a sus ojos llenos de vida, esbozando una sonrisa desafiante, invitándola a que nos unamos para lograr un objetivo que ambos compartíamos.

Al principio comenze a tomar esto como parte de un plan en el que me necesitaria para llevarme acabo,que todas sus palabras ya actos eran en falso para engañarme..

Con una mirada ingenua escuche tal historia que me relataba lo que habia vivido al principio no creia palabra alguna..pero muchos hechos concordaban con lo que antes ya me habian contando.

Sabia que a su lado,lograria infinidades de cosas..era una propuesta muy tentadora y pero mi lealtad a un seguia en Konoha..
si lo aceptaba.. algunos me tomarian por traidora.. y eso seria lo que mas me doleria


- La paz.. Dije en un pequeño susurro para que nadie mas que el pudiese escucharlo,lo que sonaba ilogico porque no habia nadie mas.

- Te entrego mi lealtad..

Fue una manera de decir "acepto" fuera de lo comun pero queria aseguarme de que el me diera su palabra por mas falsa que sea..

-Y yo la mia.

Aun mantenía fijamente la mirada en Aio.

-Ahora será mejor que vuelvas a la aldea, allí es donde debemos empezar, las aldeas están corrompidas por la avaricia, el crimen y la muerte. Debemos enviarle un mensaje a las aldeas, un mensaje que les recuerde que es lo que las mantiene unidas, darles algo por que seguir adelante.

Me levanté del suelo y me acerque a Aioris colocando mi mano sobre su hombro, despidiéndome de ella

-Nos veremos luego, recuerda que siempre estaré para ayudarte en lo que necesitas, tan solo debes llamarme.

Saqué de entre mis ropas un pergamino el cual tenía un simbolo raro, no era un Kanji, si no mas bien un dibujo.

-Cuando le envies Chakra a este pergamino, sabré cuando me necesites.

Lentamente la imagen de Aio comenzó a distorcionarse hasta que desapareció de mi dimensión, regresando al lugar donde nos habíamos encontrado.

-Nos veremos pronto.