Salí de mi habitación cuando me enteré y salí de la base. Subí a uno de los árboles. Desde allí podía ver todo el bosque, allí notaba una pequeña parte del bosque sin algunos árboles, estaba claro, ese era el claro donde entrené el fuuton.

Bueno. Eso ahora no necesito saberlo... ¿Dónde está Suna...?

Dije mientras me tocaba la barbilla, cuando localicé donde estaba Suna coloqué las manos en forma de espolón y utilicé el Byakugan, comencé a saltar de una rama a otra velozmente hacia Suna.

Tardaré un día más o menos en llegar, haber si puedo llegar pronto...

Dije observando todo a mi alrededor con el byakugan.

[1 Día Después]

Bien, ya llegué... Miraré desde aquí...

Pensé pensando en si llegaría mi Byakugan.

Comencé a examinar las murallas.

Bien... Son cuatro puertas, cada una vigilada por cinco guardias, de puerta a puerta transcurre una muralla que recubre toda la aldea, en cada tramo hay un total de veinte guardias, es decir, un total de 100 guardias exactos.

100 guardias si mis cálculos son correctos... Ahora toca dentro... aunque esto lo haré mañana...

Me fui para hacer campamento y cuando estuve allí hice una pequeña hoguera, y comencé a rasgarme la ropa (Claro, la ropa que llevaba cuando fui a akatsuki, cuando salí de Konoha) y saqué un kunai, haciéndome varias heridas con el y dándome varios puñetazos.

[1 Día más tarde]

Me levanté después de dormir mucho. Me quité el Byakugan y me coloqué la bandana en el cuello. Apagué la hoguera y comencé a andar cogeando hacia Suna, hacia una de las puertas. Varios Shinobis se quedaron mirandome, fijamente, era algo raro ver a una Shinobi por aquí.

Espero que valga el plan...

Comencé a saltar después de dejar Suna a mis espaldas, tardaría más o menos un día. Así que saltando de árbol en árbol reflexionaba sobre ese chico, Toshi... ¿Quienes eran sus padres? Al verlo me impactó todo el chakra que tenía para su edad, aun era un estudiante pero... No creo que estuviese mal que tuviese un maestro decente...

[1 Día después]

Llegué a la entrada de la puerta jadeando un poco, tuve el byakugan activo todo el tiempo mirando haber si me seguían. Cosa que no era así. Salté a la puerta de la cueva, y una enorme roca se corrió hacia un lado rodando.

Vamos allá...