Ya había salido del País del Oso y me encontraba de nuevo volviendo a Konoha con mis dos AMBU. Me encontraba un tanto extraño, esto de una Guerra, ha decir verdad creía que nunca habría una en mi existencia. Iba un poco con cabeza baja mientras pensaba en miles de cosas. La reunión fue rápida y el día seguía igual, soleado y sin ninguna nube a la vista. Caminábamos por un sendero en medio del bosque, así que por mucha calor que había la sombra de los árboles nos daban fresco. Mientras andaba pensando en miles de cosas que me entristecían noté de nuevo a esa criatura.

Una guerra ninja ¿Eh? Interesante... Jeje.

Mi expresión cambió al oírlo, no me esperaba para nada que me hablara, así que me limite tan solo a escuchar lo que decía.

Está guerra es una gran oportunidad para mi, la guerra tan solo es dolor, ver como los tuyos mueren... y yo escaparé a través de ese dolor... Jajaja. Además te han nombrado Líder así que te informaran de toda muerte, lo que implica más dolor. Uchiha...

Decía con un tono frío y provocador, pero no quería hacer nada, no quería caer en su juego. Seguí andando en dirección a Konoha mientras oía dentro de mi esas palabras.

Ya habíamos Salido del País del Oso hacia Konoha, estaba todo Calmado parecí que de regreso tampoco íbamos a tener Problemas. Caminábamos por un Sendero entre el Bosque algo Oscuro, pero teníamos todo cubierto para que no el pasara nada al Kage en el Camino, el Ninja Anbu que estaba delante parecía bastante concentrado en su trabajo de cuidar al Kage, y yo no podía dejar de Cuidarlo tampoco ni bajar mi Guardia.

Ya llevábamos 4 Horas caminando hacia Konoha, hasta que por fin se podía divisar a lo lejos la Gran Muralla de Konoha, estaba igual a como al habíamos dejado, eso quería decir que no había pasado nada, la cara del Hokage parecía de alivio y yo estaba contento de Volver. Le toque el Hombre al Kage Mientras le Decía.

Lord Hokage hemos Llegado.