Caminabamos ya por un bosque, en el cual había poca niebla, eso nos indicaba que ya estabamos muy lejos de Kirigakure. Mi aompañante era Toshiro Kaguya un Gennin que al parecer tenía ganas de ir al Examen para demostrar de que estaba echo. La luz del sol nos cubría por complet, ya había salido el sol y por lo tanto se notaba ya el calor.

Bien Toshiro... ¿Te preparaste bien para el Examen? -Dije sonriente- El Examen será muy difícil ¿sabes? Te seo toda al suerte del mundo...

Iba caminando a su lado, ibamos a un paso medianamente rápido por la prisa que nos surgia. Miraba a Toshiro impaciente por oir su respuesta.

Ya estabamos en la playa y una barca que encargué ya estaba en la orilla. Le señalé a Kakuzu la barca y me subí encima, cuando Kakuzu se montó los 2 hombres de la barca empezarón a remar. Llevabamos ya un rato en aquella barca cuando decidí darle un consejo a Toshiro.

Toshiro... Te daré un consejo para el Examen Chunnin. Debes trabajar en equipo con los compañeros que te toquen, no lograrás nada solo, el trabajo en equipo es la clave, tengo en mente. -Dije serio pero sonriente- Debes intentar que tu equipo este unido. Recuerdalo.

Después de un rato más, la barca por fin llegó a su destino. Aún nos quedaba un rato más para llegar a Sunagakure, nos fañtaba una caminata por el desierto.

Al llegar a la Playa ya Kaminari-Sama tenia una Barca lista el me la señalo y nos montamos para zarpar lo mas rápido posible y así llegar antes de que anocheciera a Sunagakure. Los hombres dueños de la Barca empezaron a remar y luego de un rato Kaminari-Sama se volteo hacia mi dándome un consejo el cual no me gustaba mucho, ya que prefería trabajar solo que en grupo, pero para no ser descortés le respondí con su misma seriedad.

Mmm...! Por supuesto Kaminari-Sama tomare el Consejo en Cuente para el examen...!

Después de unas hora aproximadamente de estar en la Barca, le dimos las Gracias a los conductores les pagamos y seguimos caminando. Luego de varias horas ya habíamos pasado los Bosques de el País del Fuego y íbamos por ya bastantes adentrados en el desierto. Y de repente empezaron a escucharse voces, que provenían de la Aldea de Sunagakure que se veía a lo lejos. Y le dije a Kaminari-Sama sonriendo.

Mire Sensei estamos llegando..!