El día abrumador que hacía hoy implicó que bajara mi velocidad, o me deshidrataría muy rápido dentro del desierto, por lo tanto debía de proporcionar bien mi energía y mi agua para no gastármelo todo tan rápido y no morir de sed y deshidratación puesto que el sol estaba totalmente devastador el día de hoy. Iba con cuidado puesto que yo mismo sabía que las primeras trampas, es decir las que puse más cercanas a Sunagakure son las más mortales, y a medida que me fuera alejando iría disminuyendo el nivel de peligrosidad de las trampas, puesto que obviamente está diseñado para cuando tenemos visitantes inesperados, pero bueno iba caminando con cuidado de no pisar nada además de que yo ya sabía donde se encontraban todas las trampas, ahora solo tenía que enfocarme en ir más al sur hacia Kumogakure, para realizar la misión que me fue encomendada; no sería fácil pero debía hacerlo además de que estaba emocionado en realizarlo puesto que me encantan los desafíos. El tiempo pasaba, el sol bajaba poco a poco lo que hacía disminuir la temperatura ambiental poco a poco y así podía acelerar más el paso sin deshidratarme tanto, además por la noche debería encontrar un buen refugio, puesto que es cuando más tormentas de arena suelen originarse, y para colmo es cuando hace más frío, tanto frío que te puedes congelar en la temporada de invierno si no vas bien abrigado. Y así continué mi camino más y más lejos de mi aldea, ya había pasado por mucho la etapa de las trampas, ahora me dirigía a la frontera con el país del rayo, a pedir autorización para entrar y luego seguir el último tramo hasta la aldea de la nube.....

-Este será un viaje largo y agotador....*sigh* (-,-')....-

El desierto comenzaba a terminarse poco a poco, eso me indicaba que me estaba acercando cada vez más hacia la frontera con el país del rayo, iba a toda velocidad puesto que era de noche así que el ir rápido no me afectaba puesto que no me deshidrataba, y además de eso mantenía mi cuerpo en constante calentamiento lo que hacía que no me congelara si bien sentía frío, aunque cabe destacar que iba con una capa por encima como un abrigo más para protegerme, además de que ocultaba mi calabaza a simple vista....-Puff, ¿cuánto más voy a demorar en llegar a la frontera?, no pensé que quedara tan lejos *sigh*, bueno no importa....hugh!, esto es!!...- escuchaba un leve sonido de viento, apoyé mi mano en la arena del desierto y sentí un gran estremecimiento, al parecer se acercaba una tormenta de arena enorme, por lo tanto debía encontrar o realizar un refugio de inmediato o me vería en serios problemas si esa tormenta de arena me atrapara. Busqué por todos lados pero no había ninguna duna la cual pudiera hacerle un agujero para hacer un refugio, por lo que comencé a concentrar chakra en la arena y formé yo mismo una especie de duna de arena, y la moldee con una entrada y así me metí en ella, luego la cerré completamente y solo podía oír como el viento se hacía mas fuerte afuera y se escuchaba la tormenta de arena pasar....así estuve varios minutos hasta que finalmente dejó de pasar y esa era mi señal para continuar con el viaje. Después, deshice el refugio improvisado de arena saliendo de el, y finalmente ya podía divisar a lo lejos la frontera con el país del rayo, lo que me alivió mucho puesto que ya tenía la mitad de mi viaje realizado, ahora solo me faltaba otra mitad y ya estaría llegando a la aldea de la nube......

Divisaba la frontera con el país el rayo a unos pocos kilómetros de distancia, así que ahora podría completar la mitad de mi viaje y debería de llevarme con más cuidado puesto que entraría en territorio extranjero, sobretodo que nunca había ido al país del rayo por lo tanto no sabía que peligros o maravillas me esperaban allí, aunque probablemente fueran más peligros que maravillas...y así llegué a la frontera finalmente, donde las personas formaban para pasar de un país al otro, del país del viento al del rayo y viceversa, yo mientras me acercaba tuve que disimular bien que llevaba muchas armas y eso, ya que sino probablemente no me dejarían entrar al país...finalmente llego a la puerta de entrada al país del rayo y comienzo a hablar con uno de los guardias...-Guardia de la frontera: Necesito su identificación, supongo que de shinobi cierto?, bueno démela, la chequearemos y luego veremos si lo dejamos pasar.- dijo algo despreocupado, al parecer le aburría estar trabajando allí como guardia de la puerta, pero bueno ese era su trabajo, yo por mi parte accedí y le entregué mi documento especial, y cuando el guardia lo vio me lo devolvió y le ordenó a los que se encargaban de las puertas el abrirlas para que me dejasen pasar.

Ahora había logrado entrar en el país del rayo, debía de tener más cuidado a partir de ahora, talvez al igual que en mi aldea hayan trampas a medida que me acerque a Kumogakure, por lo tanto empecé a ir cada vez con más cuidado y más precavido, aumentando mis 5 sentidos al 150%....

-Bien, un poco más y empezará lo interesante...-

Ya dentro del país del rayo, solo me quedaba el último tramo hacia Kumogakure no sato, debía de ser precavido puesto que no sabía que peligros podía afrontar luego, además de que debía tener en cuenta que tal vez no me reciban bien si me descubren, por lo que esta sería como una misión secreta de clasificación de dificultad A...Me dió algo de hambre, por lo que saqué de un bolso liviano que traía unos sandwiches que me había preparado para comer en cuanto sintiera eso, y pues como así fue empecé a comerlos (sacándome la máscara claro) a medida que iba caiminando hacia la aldea de la nube. Luego de un buen rato de estar caminando y haber terminado de comer, estaba pensando como podría realizar lo que vine a hacer a esta aldea, puesto que no sería algo fácil hacerlo así como así, debía ser preciso en todo lo que fuera a pasar y estar atento en todo momento vigilando todo a mi alrededor para estar seguro....

A medida que me iba acercando a la aldea al parecer empezaban a notarse más nubes en el cielo, y muchas también al nivel de la tierra lo que generaba espesas neblinas las cuales no dejaban ver mucho, por lo que ahora era cuando debía tener más cuidado que nunca, un solo paso en falso y todo podría terminar para mi. Usé mis habilidades de orientación como shinobi para arreglármelas y llegar finalmente a Kumogakure....y después de otro buen rato caminando, y atravesando ciertas trampas que habían, ahora bajé mi nivel de chakra, cosa que no se pudiera detectar por nada del mundo, puesto que en todas las aldeas se tiene mas o menos ninjas sensoriales los cuales detectan através de una burbuja de chakra que rodea la aldea, detectan chakras que se acerquen a ella, sobre todo los que son ajenos a la aldea....