Viajo asi para el país de las olas junto al anciano político, fue un viaje silencioso sin mucho que decir ni hacer, era terrible tener que soportar todo un viaje hablando de leyes, la verdad es que a ninguno de los dos le nació hablarse y esto era algo de ambos. Caminaron por el bosque sin contratiempos todo era demasiado tranquilo esto perturbaba al joven Hyuga que veía como todo se desenvolvía tranquilo, ni siquiera tuvo que utilizar su byakugan porque esto no le resultaba del todo peligroso, presentia que algo pasaría pero no era el momento. Siguieron ambos sus caminos por los bosques y partes recónditas. Siempre atentos a cualquier amenaza de peligro, el dia golpeaba con serenidad el clima templado era bastante agradable y los pajaros que planeaban con el viento eran atractivos distractores de la realidad del viaje cosa que hacia Arekus al por mayor imaginarse a el y su padre de viaje, jugando y entrenando, debía ser quizás porque paso a chunin era por eso que no podía evitar pensar en su padre constantemente lo sentía con el y sentía que estaba cumpliendo la voluntad de este, estaba aferrado a su camino ninja esto lo fortalecía como ninja y sin esto estaría perdido como un niño que ha perdido la voluntad de la curiosidad o un hombre que no le queda nada mas para vivir.